La verdadera pregunta

La esgrima y Jorge Pina por Jaume de Laiguana
El Gato » artículo

¿Por qué haces esgrima?

Hace unos años Jorge Pina, en su mejor momento deportivo, escribió un artículo en una revista junto con las fotos del ya conocido por aquí, Ignacio Casares. (Lamentablemente las fotos no las hemos podido conseguir)

Una interesante y preciosa reflexión sobre nuestro deporte. Os la dejamos sin tocar ni una palabra. Disfrutad.

“Periodistas, curiosos, conocidos y maleantes, todos reaccionan igual, conocen parte de la historia, ponen cara de póker y hacen la original pregunta: ¿por qué haces esgrima?”

“La repetición de la pregunta me lleva a un nuevo entretenimiento, cada vez que alguien pregunta pongo a prueba mi inventiva improvisando diferentes respuestas dependiendo del preguntante y el contexto, improvisar me divierte… todos hemos sido esgrimistas en nuestra infancia, todos hemos jugado a ser piratas o mosqueteros, a batirnos en duelo… por eso me gustaría preguntar ¿Por qué dejaste tú de hacer esgrima?

De los juegos entre niños pasé, hace 20 años, a una pequeña sala de esgrima en la calle Alcalá¹. Sin saber siquiera si me llegaba a gustar o no, me decían que era bueno y ya sabéis lo importante que resulta el refuerzo positivo para los niños. Enseguida empecé a competir internacionalmente: con 15 años quedé finalista en el Campeonato del Mundo cadete, con 18 logré la medalla de bronce en el Campeonato del Mundo junior, con 21 me coloqué entre los 20 mejores sablistas del mundo… El año pasado, en 2007, gané el Campeonato de Europa. Y este verano 2008, logré un diploma olímpico en Pekín

 

Jorge Pina vence a Aldo Montano en Pekín, Esgrima

Jorge Pina venciendo a Aldo Montano para meterse entre los 8 mejores en los Juegos Olímpicos de Pekín 2008.

Jorge Pina por Jaume de Laiguana para un calendario de los deportistas de Pekín 2008. En este caso le toca a la Esgrima

Foto de Jaume de Laiguana para un calendario con los deportistas seleccionados para Pekín 2008. Instagram | Web | Twitter | Facebook

Así contado parece fácil dejando de lado las decepciones y lesiones que te hacen plantearte el sentido que tiene tanto esfuerzo para ser mejor que otro con una espada. 

En cualquier caso, aparte de un currículum, el bagaje más importante que se lleva cualquier deportista a este nivel, son las experiencias, el compañerismo, aprender a trabajar en equipo, recorrer multitud de países y desde luego, compartir el momento de desfilar en la inauguración de unos Juegos Olímpicos. 

La primera vez que competí en un Campeonato de España éramos 4. A la semana siguiente competí en Francia y en la misma categoría había 200 niños franceses. Aún siendo un chaval, me daba cuenta de que los mejores entre 200 suelen ser bastante superiores a los mejores entre 4. Lo que cuando siendo un niño me parecía tan difícil, es lo que me provoca una enorme alegría las contadas e importantes ocasiones en que he conseguido ganar. Gracias al trabajo y a la ilusión de mucha gente, las cosas se van igualando y ya podemos presumir de tener medallas en todo tipo de campeonatos, Europeos, Mundiales y Juegos Olímpicos. 

“Tras muchos años batiéndome en duelo con la espada, no he encontrado oro, ni joyas ni piedras preciosas”

De vez en cuando vuelvo por la pequeña sala de la calle Alcalá y donde antes éramos 4, ahora somos 100. No sé qué me deparará mi futuro deportivo, pero me temo que no siempre podré vivir del jugo. Lo que tengo claro es que la esgrima seguirá creciendo. Y vendrán otros a los que les podremos exigir que miren sin complejos a sus rivales desde la primera competición. Y me encanta sentirme parte de esta evolución. 

Pero tampoco quiero engañaros, lectores de Otrotipo². Tras muchos años batiéndome en duelo con la espada, no he encontrado oro, ni joyas ni piedras preciosas. Quizás sea otra consecuencia de las hipotecas subprime, pero también puede que el concepto de tesoro haya evolucionado. El que quiera ser esgrimista no encontrará doblones de oro, pero vivirá las sensaciones de un deporte apasionante que mejorará su condición física de una manera bastante más divertida que con el afamado método Pilates. 

Los molinos de viento se van haciendo más pequeños a medida que crece nuestro entusiasmo y nuestro medallero. Además no hay muertos, mutilados ni tuertos. 

Las agujetas, y desde luego las decepciones que puede sufrir todo romántico, son el único dolor que pueden sentir los caballeros andantes del siglo XXI.

Jorge Pina Pérez

Campeón de Europa 2007. Diploma Olímpico Pekín 2008.”

¹ Esa antigua sala de la calle Alcalá es el Club de Esgrima de Madrid. Llegó a ser el club más grande de España cuando tuvo sus instalaciones en el el WizinkCenter. 

² Otrotipo fue la revista en la que se publicó el artículo, en su primer y último número.